19 de mayo de 2008
CRÓNICA DEL ENCUENTRO CON FRANCISCO M. MARÍN AUTOR DE EL ENIGMA DE LA DAMA AFGANA
4º de secundaria, Departamento de Lengua castellana y literatura
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EL AUTOR
Si Marín es riman, si le gusta jugar con las palabras (imagen/enigma), si le atraen los anagramas y los palíndromos y los símbolos, ¿es un poeta?
Si se apasiona por conocer otras épocas, si le interesan otros lugares y otras culturas, si su mente imagina historias y las vive, ¿es un viajero?
Si conoce a Lasker o Capablanca, ¿es un ajedrecista? Si a Merlín o Morgana, ¿es un mago?
Tras la lectura del libro El enigma de la Dama Afgana, nuestra profesora de Lengua castellana y literatura nos había propuesto hacer una breve descripción de cómo nos imaginábamos al autor: pelo canoso, gafas, barba.
El lunes 19 de mayo, nuestro instituto ha recibido la visita de Francisco M. Marín. Nada más verlo nos dimos cuenta de que no era tal como nosotros lo habíamos recreado, nuestras descripciones estaban equivocadas. Víctor Muñoz le leyó una adaptación de todas las descripciones realizadas a alguien que no tenía el pelo canoso, ni llevaba gafas, ni tenía barba. No sin una sonrisa mal disimulada, él nos pidió que se las entregáramos. Y ya desde el principio nos confirmó que en algo no nos habíamos equivocado: es un hombre muy simpático y alegre, y en todo momento supo crear un ambiente agradable y de confianza.
El autor nos explicó que empezó a escribir novelas juveniles gracias a su hija Berta (a la que dedica el libro). Cuando ella preguntaba ¿Qué hace papá?, siempre le respondían que estaba escribiendo. Su padre, además de no estar con ella, escribía libros ¡que no podía leer! Hasta que ambos hicieron un trato: en cuanto él acabase el libro que escribía, los dos empezarían un nuevo proyecto, un libro para jóvenes escrito por ambos. Juntos buscaron los temas, los personajes, los lugares, la historia. Juntos leían. Ahora ella prefiere a los de su edad, pero él sigue creando historias por si en otro momento vuelven a coincidir.
Francisco M. Marín no sólo es escritor, sino que también es profesor de Historia. ¿Cómo reparte su tiempo? La distribución no es exacta: según el horario del instituto, escribe por las mañanas o por la tarde; unos años la combinación es sencilla, otros más compleja. En la novela que hemos leído se refleja su faceta de historiador: personajes históricos (como Brydon o Capablanca) conviven con los inventados (Petras, Hannak…). Sin embargo, no le interesa ni escribir ni leer novela histórica.
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LA OBRA
Imagen. Enigma… Imagen otra vez… Seis letras que, combinadas de distinta manera, encierran dos palabras complementarias. Hay gente que cree en la importancia de la imagen, pero pocos saben valorar un verdadero enigma. Sin embargo… […]
… Como así ocurrió.
Entre el primer párrafo y el último, El enigma de la Dama Afgana nos introduce en el mundo de los agentes secretos de La Compañía Oriental, dedicada a desentrañar enigmas. Los sentimientos, las aventuras y el misterio son ingredientes básicos del viaje a que nos invita el libro.
La lectura de varios fragmentos de la obra seleccionados por los alumnos sirvió de introducción al diálogo. Así, las palabras escritas por el autor, leídas por sus lectores, ayudaron a despertar la magia de la literatura.
La ronda de preguntas sobre la novela no parecía querer empezar: bien por la extraña sensación de tener un escritor tan cerca; bien porque necesitábamos identificarlo con la idea que de él nos habíamos hecho, o bien porque era lunes y aún no estábamos despiertos. Una vez iniciada, lo difícil fue retener la ansiedad de las manos levantadas para participar: primero, con preguntas preparadas en clase; después, con las que iban surgiendo de la conversación.
¿Cómo se le ocurrió la idea de la novela?
¿Cómo crea los personajes?, ¿cómo busca sus nombres?, ¿qué significados tienen? ¿Con qué personaje se identifica más?
¿Ha viajado a todos los lugares que aparecen?
¿Qué función tienen los animales en el libro?
Una vez escrita una novela, ¿qué se hace para publicarla?
…
Con voz pausada y firme, con gesto expresivo y citando con frecuencia experiencias pasadas (en las que en ocasiones incluía a Marga Díaz), el autor analizó el libro a través de nuestras preguntas y nos confesó algunos planes de futuro.
¿Existirá una segunda parte?
Nos confirmó que ya está escrita; ahora depende de los editores: El enigma del cuadro blanco (provisional). Buscaremos nuestro reflejo en sus páginas.
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L@S LECTOR@S
El acto transcurrió como todos esperábamos. Los alumnos hicimos preguntas relacionadas con el libro y con la vida, si es que no son lo mismo, y él nos respondía con gran amabilidad. La cordialidad y el interés hicieron que en ningún momento se elevara el tono utilizado por los alumnos y que la hora se hiciese corta (el tiempo es siempre subjetivo).
Al final de la conversación, nos firmó el libro a un grupo numeroso de alumnos que hicimos cola para que nos lo dedicase; porque sabíamos que así nos llevaríamos una llave más de la caja de nuestros recuerdos. Él anotó algunos de los nombres para próximos libros. ¡Quién sabe si alguno llegará a ser personaje de novela!
Sus libros, sus palabras, su dedicatoria…
Crónica elaborada a partir de los textos de Núria Egidos, Fernando de Muga, Mercedes Herreras, Irene Palomares y Ana Pastor
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SUGERENCIAS DE LECTURA
NOVELAS JUVENILES DE FRANCISCO M. MARÍN
Montañas de la luna. Barcelona: Alba, 2000
Corazón de tigre. Barcelona: Alba, 2001
El enigma de la Dama Afgana. Barcelona: Planeta&Oxford, 2007
RELATOS QUE DIALOGAN CON EL ENIGMA DE LA DAMA AFGANA
BORGES, J. L. “Funes el memorioso”.
Ficciones. Madrid: Alianza, 2006.
www.literatura.us/borges/funes.htmlPOE, E. A.
La carta robada y otros cuentos. Losada.
http://www.bibliotecasvirtuales.com/biblioteca/narrativa/Poe/lacartarobada.asp
POE, E. A.
Berenice y otras mujeres misteriosas. Panamericana.
RENAULT, M.
Alejandro Magno. Barcelona: Edhasa, 2002 (Pocket)
VERNE, J.
La isla misteriosa. Madrid: Alianza (Biblioteca juvenil)
